Hola a tod@s!
Ha pasado la semana Nobel y a falta de saber quien o quienes serán los que se lleven el de Economía (con la que está cayendo) ya se conocen los de Medicina, Física, Química, Literatura y Paz. El primero reconoció, finalmente, a uno de los padres de los bebés probetas, digo uno porque el otro ya no se encuentra entre los vivos. El agraciado, Robert Edwards, con 85 años está enfermo, no pudo responder a la llamada del secretario del comité Nobel. Los suecos han esperado demasiado para otorgar este premio que ha permitido el nacimiento de más de 4 millones de niños. En su línea y como no podía ser de otra manera, el Vaticano elevó su afectada voz para protestar y tildar de Mefisto a Edwards diciendo cosas como: “es el responsable de que el hombre pase de ser sujeto a objeto”. Con estos señores en el poder estaríamos premiando el invento de la rueda. Por su parte el premio de Física ha sido todo lo contrario, por una vez y ojalá que sentando precedentes, se reconoce un hito científico relativamente reciente y a unos científicos que están en la plenitud de su carrera (uno de ellos con 36 años). La historia comenzó cuando un físico de origen ruso, afincado en el Reino Unido, no tenía un tema de envergadura para la tesis de otro ruso más joven que quería doctorarse bajo su égida. Así ideó estudiar las propiedades de una capa muy fina (bidimensional) de grafito. De esta manera surgió el grafeno, un material que ya está en las miras de un sin número de aplicaciones tecnológicas. ¿Sabéis cómo lo obtuvieron? Increíblemente fácil: por un lado un pedazo de grafito, por otra una cinta adhesiva, esta última la pegaron al grafito y luego la despegaron de un tirón… vamos lo que viene siendo una “depilación”. La finísima capa de grafeno queda adherida a la cinta. El grafeno promete ser la base de pantallas bidimensionales de extrema flexibilidad que podrán llevarse dobladas en el bolsillo del pantalón… cosa que aún no hemos visto ni en las películas de ciencia ficción. Pasando al de Química, el premio recayó en la síntesis orgánica, más precisamente en el llamado método del paladio que permitió la obtención sintética de moléculas orgánicas muy complejas. Los galardonados, dos japoneses y un americano, son científicos activos. Moviéndonos a uno de los dos premios más comentados, el de Literatura, finalmente tenemos a Varga Llosa con su merecidísimo Nobel. La noticia lo sorprendió en Nueva York y no se lo creía. Este año no partía como favorito según miles de listas, no obstante unas horas antes de conocer la noticia había publicado en mi facebook la siguiente nota: “hoy dan el nobel de literatura, ¿Será para Varga Llosa o tendremos a otro gran desconocido?” Ahora recuerdo lo primero que me leí de él… estaba en Cuba, buscaba con ansiedad letras de aquel escritor prohibido por el régimen y encontré, por casualidad, “La ciudad y los perros”. Para terminar, el Nobel de la Paz al escritor y activista chino Liu Xiaobo, quien a sus 54 años está en prisión en el país asiático. Me congratula enormemente que el comité haya decidido otorgar el premio a este señor, finalmente se le da un buen tortazo al gobierno chino que, por ser la segunda economía mundial, se cree con bulas eternas. Este país es la mezcla de lo peor del comunismo con lo peor del capitalismo y, hasta hoy, el mundo occidental le bailaba el agua. Era hora de frenarles los pies y demostrarles que no creemos en sus fachadas. Y ya os dejo, no sin antes recomendarles una película: “Enterrado” (Buried); si el mundo cinéfilo halagó hasta la saciedad a Hitchcock por su “Náufragos” (Lifeboat, 1943), donde hace peripecias para mantener el ritmo cinematográfico dentro de un bote, aquí se logra con un actor que apenas vemos, un móvil, algunos artefactos para iluminar pocas escenas y todo esto metido en una caja bajo tierra… Una vez más: ¿Quién dice que España no tiene uno de los mejores cines del mundo?
Os quiero,
Ed.
PD: Boris el pueblo es Jovellanos.
Ha pasado la semana Nobel y a falta de saber quien o quienes serán los que se lleven el de Economía (con la que está cayendo) ya se conocen los de Medicina, Física, Química, Literatura y Paz. El primero reconoció, finalmente, a uno de los padres de los bebés probetas, digo uno porque el otro ya no se encuentra entre los vivos. El agraciado, Robert Edwards, con 85 años está enfermo, no pudo responder a la llamada del secretario del comité Nobel. Los suecos han esperado demasiado para otorgar este premio que ha permitido el nacimiento de más de 4 millones de niños. En su línea y como no podía ser de otra manera, el Vaticano elevó su afectada voz para protestar y tildar de Mefisto a Edwards diciendo cosas como: “es el responsable de que el hombre pase de ser sujeto a objeto”. Con estos señores en el poder estaríamos premiando el invento de la rueda. Por su parte el premio de Física ha sido todo lo contrario, por una vez y ojalá que sentando precedentes, se reconoce un hito científico relativamente reciente y a unos científicos que están en la plenitud de su carrera (uno de ellos con 36 años). La historia comenzó cuando un físico de origen ruso, afincado en el Reino Unido, no tenía un tema de envergadura para la tesis de otro ruso más joven que quería doctorarse bajo su égida. Así ideó estudiar las propiedades de una capa muy fina (bidimensional) de grafito. De esta manera surgió el grafeno, un material que ya está en las miras de un sin número de aplicaciones tecnológicas. ¿Sabéis cómo lo obtuvieron? Increíblemente fácil: por un lado un pedazo de grafito, por otra una cinta adhesiva, esta última la pegaron al grafito y luego la despegaron de un tirón… vamos lo que viene siendo una “depilación”. La finísima capa de grafeno queda adherida a la cinta. El grafeno promete ser la base de pantallas bidimensionales de extrema flexibilidad que podrán llevarse dobladas en el bolsillo del pantalón… cosa que aún no hemos visto ni en las películas de ciencia ficción. Pasando al de Química, el premio recayó en la síntesis orgánica, más precisamente en el llamado método del paladio que permitió la obtención sintética de moléculas orgánicas muy complejas. Los galardonados, dos japoneses y un americano, son científicos activos. Moviéndonos a uno de los dos premios más comentados, el de Literatura, finalmente tenemos a Varga Llosa con su merecidísimo Nobel. La noticia lo sorprendió en Nueva York y no se lo creía. Este año no partía como favorito según miles de listas, no obstante unas horas antes de conocer la noticia había publicado en mi facebook la siguiente nota: “hoy dan el nobel de literatura, ¿Será para Varga Llosa o tendremos a otro gran desconocido?” Ahora recuerdo lo primero que me leí de él… estaba en Cuba, buscaba con ansiedad letras de aquel escritor prohibido por el régimen y encontré, por casualidad, “La ciudad y los perros”. Para terminar, el Nobel de la Paz al escritor y activista chino Liu Xiaobo, quien a sus 54 años está en prisión en el país asiático. Me congratula enormemente que el comité haya decidido otorgar el premio a este señor, finalmente se le da un buen tortazo al gobierno chino que, por ser la segunda economía mundial, se cree con bulas eternas. Este país es la mezcla de lo peor del comunismo con lo peor del capitalismo y, hasta hoy, el mundo occidental le bailaba el agua. Era hora de frenarles los pies y demostrarles que no creemos en sus fachadas. Y ya os dejo, no sin antes recomendarles una película: “Enterrado” (Buried); si el mundo cinéfilo halagó hasta la saciedad a Hitchcock por su “Náufragos” (Lifeboat, 1943), donde hace peripecias para mantener el ritmo cinematográfico dentro de un bote, aquí se logra con un actor que apenas vemos, un móvil, algunos artefactos para iluminar pocas escenas y todo esto metido en una caja bajo tierra… Una vez más: ¿Quién dice que España no tiene uno de los mejores cines del mundo?
Os quiero,
Ed.
PD: Boris el pueblo es Jovellanos.
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